Rodando libres

El móvil nos despertó a las 06:45h pero sólo pude tocar la tecla para hacerlo callar… A las 07:15h empezó el día con prisas: teníamos que estar a las 08:30h en el punto de encuentro (Palacio Pedralbes). Justo, pero llegamos a tiempo.

El tramo desde Vilanova, nublado; un poco de frío y, justo a la altura de Gavà, vimos   nacer el sol a nuestra derecha. Por la noche, Sonia me comentó que hacía por lo menos dos años que no lo veía.  Yo añadí  que también lo vimos morir.

Al llegar al primer semáforo de Barcelona, el piloto del punto muerto dejó de funcionar… nada que no se pueda arreglar en la próxima revisión.

En el tramo hasta llegar al segundo punto de encuentro casi nos congelamos: qué frío y sin desayunar!!!.  Todos nos lanzamos como la marabunta a por un café calentito.  El termómetro marcaba 3º, poco usual a estas alturas de otoño.

Pep dió el pistoletazo de salida y los demás le seguimos. Sonia me recomendó pegarme a los primeros ya que en este tipo de salidas es lo más apropiado y lo puse en práctica. Recorrimos el camino que cada semana hago para subir o bajar de Andorra parando por segunda vez en la Área de Bassella donde está el museo de la moto  (www.museumoto.bassella.com).

Aproveché y me compré los únicos tres ejemplares de HD a escala 1:18 y otro cafetito…

Al llegar a Coll de Nargo giramos a la izquierda. Parada técnica para salir espaciados cada 10 segundos. El sol nos calienta, el día está totalmente despejado y empezamos a disfrutar de las constantes curvas por las que nos ha metido nuestro amigo Pep.

Cómo es lógico, el nivel de los participantes es diferente: empiezan los adelantamientos, las distancias se alargan y el grupo de cabeza se reduce a 7 motos…

Estaba tan tranquilo en la 4ª posición cuando, de repente, llega Eduard, me adelanta, adelanta al de delante, las estriberas empiezan a rascar por el asfalto y el de delante empieza a picarse… Yo me quedo tranquilo en mi posición, Eduard se deja adelantar y se pone detrás mío. A los pocos segundos, Correcaminos llega y nos adelanta a los tres, pero en una curva casi no tiene espacio y entra paralelo al otro; yo clavo el freno (y la rueda), no pasa nada. En la 1ª recta me pongo paralelo a Eduard y nos reímos de la gente que se pica… Al llegar al siguiente pueblo, todos amigos y muchas risas.

Una vez reunido de nuevo el grupo, tras casi 15 minutos de espera, nos dirigimos, esta vez respetando los límites de velocidad, al Castell de Montsonís. Visitamos el castillo  y, sobre las 15:00h, empezamos a comer.

Esta vez hay muchas caras nuevas. Alguna queja sobre la cantidad excesiva de kilómetros o las pocas paradas; pero, por lo menos en nuestra mesa, el comentario ha sido que en la web ponía «Prepareu el cul, hi ha moto» y coincidimos en que si uno no está preparado, es mejor que no venga.

Al final de una buena comida, la gente empezó a irse ya que se disputaba el último gran premio del mundial de F1. Nosotros llegamos a carrera empezada pero a tiempo para disfrutar del triunfo de Ferrari y la debacle de McLaren. Desde aquí, felicidades una vez más!