2015_Montjuïc
enero 4, 2015
Después de pasar el duro mes de diciembre entre curro y comidas navideñas volvemos a salir por la Ciudad Condal, hoy hemos decidido ir a visitar la montaña de Montjuïc.
Salimos de la Ronda Litoral por el paseo de la Zona Franca, giramos a la derecha y, antes de llegar a la “zona olímpica” giramos otra vez a la derecha, pasamos el cementerio y, un poco más adelante reduzco para aparcar, justo allí oigo: ¿Pero a donde vas? a la que contesto: a aparcar. Entonces Mon me indica que todavía estamos cerca del cementerio y que debemos seguir subiendo, vale.
un poco más arriba encontramos aparcamiento y nos vamos a un mirador donde está a nuestros pies prácticamente casi la totalidad del puerto mercantil, el sol está alto y calienta pero no nos permite sacar aquellas fotos que merece la vista que alcanza también parte de el Baix Llobregat y Barcelona.
Seguimos andando hacia arriba pasando por un merendero hasta llegar a una muralla separada desde nuestra posición por un foso bastante grande, A lo lejos vemos un cañón.
A pesar de estar a principios de enero la temperatura es suave, al empezar a tener calor me quito la chaqueta. hay bastante gente paseando, corriendo, bicicletas y hasta un tío con caballo al trote. Pasamos al lado de una concentración de galgos, antes de llegar a la entrada del castillo hay también unas dianas para el tiro con arco a varias distancia. Vamos que esto está muy animado.
Unos veinte minutos han sido necesarios para sacarnos las entradas, la mayoría guiris, delante nuestro unas chicas francesas y detrás dos parejas rusas. Fuera de la fila oigo: que no voy a pagar diez euros para entrar, justo entonces veo el cartel con los precios, son 5,00€ por persona, creo que un precio razonable.
Justo antes de comprar los tickets, un español le pregunta al chico de la taquilla si es correcto que la entrada al castillo es gratuita todos los domingos, la respuesta es: a partir de las 15:00h. Es la una pasada y ni nos ocurre esperar dos horas así que pagamos y entramos.
pasamos el puente de acceso, de bajo se puede apreciar un césped muy bien cuidado, lastima que la sombra tampoco nos permite sacar unas bonitas fotos.
Este castillo ubicado en una zona estratégica que domina la ciudad y el mar, ha sido construido en 1640 y la reforma definitiva se empezó en el año 1753, terminándola en 1779.
Es típicamente un fortín militar simple y sencillo, lo más hermoso son las maravillosas vistas que desde cualquier punto que nos pongamos a observar, nos brinda. Es curioso cómo desde esta perspectiva, Barcelona es más parecida a una casba que a la ciudad que es en realidad con anchas calles y enormes y largas avenidas, la única que podemos apreciar claramente es la avenida Tarragona. En la parte superior los parques, a lo lejos las montañas. Una visión para mi totalmente nueva a pesar de vivir aquí desde hace casi tres décadas.
En el medio del patio de armas hay un globo donde se refleja la gente que me recuerda mucho el que hay instalado en otro parque en Chicago, fotos y nos vamos. Al salir y ver la parada del funicular pienso: lo cogemos, bajamos en la Barceloneta, comemos, subimos y nos vamos con el coche así nos ahorramos el parking. Bueno esa era la idea, la realidad ha sido otra…
Para empezar el trayecto ida y vuelta vale 11,50€ por persona y no baja hasta la Barceloneta, simplemente baja un tramo, gira 45º vuelve a bajar y te deja justo en frente a las piscinas. Pregunto a la chica para el otro funicular y me dice que hay que andar unos diez minutos en aquella dirección, grr. Total que al otro lado de la calle hay un restaurante, pues allí que vamos.
A la entrada hay un portero, entramos y hay una terraza tipo chillout, bajamos por la escalera, justo en este momento le digo a Mon: aquí nos van a clavar.
Una vez sentados podemos apreciar una vistas espectaculares, la comida genial, gambas de Palamós, arroz con bogavante y sorbetes de limón, la cuenta no tanto pero nos hemos ahorrado el parking… el nombre: el Xalet (www.gruptravi.com/xalet-montjuic/).
Vuelta atrás por el teleférico donde saco una foto muy divertida, regresamos por el camino de la mañana hasta cortar por el bosque para llegar al coche y, de paso, Mon recoge unas piñas para la chimenea.
En casa y a jugar a los dados, jiii.
enero 5, 2015 a las 11:21 PM
Como siempre suele pasar… Un día divertido!!! Empezamos esté invierno hacer de giris y creo que ha sido una buena decisión, pese que tengo o tenía vértigo lo pasé genial en el funicular.
TVMB