2017_Santa Coloma de Queralt
marzo 19, 2017
Después de tanto tiempo, la verdad es que ni me acuerdo cuando fue la última vez, hemos quedado hoy para salir casi todo el “Petit Comité”. Punto de encuentro La Pava en la autovía de Castelldefels a las 10:00h.
Anoche vino JL con su nueva pareja Fina a casa a cenar y a dormir para así salir juntos esta mañana con la Electra de Carlo que se la presta para que puedan añadirse al grupo. Ha costado bastante convencer a JL en volver a conducir, la culpa es de su hombro que ha quedado bastante mal tras su caída en Brasil, la duda consistía en saber si podía estar a la altura de aguantar la moto, yo le decía claro que sí, pero él no las tenía todas consigo.
Después de una velada en buena compañía sin pasarnos con el alcohol, nos poníamos a dormir a una hora prudente, esta mañana en pie sobre las 8:00h y por turnos, cuatro con un solo cuarto de baño la cosa se complica, hemos conseguido desayunar, ducharnos, vestirnos, recoger las Harleys y llegar unos 10min antes de la hora prevista para el encuentro.
Una vez allí ya estaban Chico y Sonia, poco a poco van llegando todos, Oriol, Edu y Inma, Pepe y Olga, Ton, Gus y pareja, Vicenç y Olga, José Luís y Mari Pau irán directamente al restaurante. Besos y abrazos, si bien es verdad que hemos coincidido con algunos en Roma o Croacia, con otros hacía una vida que no nos veíamos, más tarde en la comida mi comentario fue: este grupo es la ostia, da igual que no nos vemos durante un año o más porqué cuando volvemos a reunirnos somos capaces de seguir con una conversación dejada la última vez, como si nada hubiese pasado, esto mola un mogollón.
Salimos en dirección Sitges por las costas, Mon se pone a grabar con la GoPro mientras yo adelanto y me vuelvo a hacer adelantar, el día es el típico de primavera ni frío ni calor algo nublado. Una vez pasado Sitges nos metemos en la autopista para recorrer el tramo hasta Vilanova i la Geltrú donde salimos en dirección al pantano de Foix.
Esta carretera siempre me ha gustado. Tras varias curvas, Oriol, Edu y Inma se paran y hacen señal al resto de seguir, nosotros paramos, Chico y Sonia también. Inma ha recibido una mala noticia, su tío llevaba toda la semana en el hospital y esta mañana ha muerto, se lo esperaba, pero cuando llega el momento siempre da pena. Se despiden y se van, lástima.
Nos reunimos más adelante con el resto del grupo y seguimos, Oriol al frente del grupo conduciendo como buen Road Captain que es sin prisa, sin pausa a una velocidad más que correcta. JL tiene la cara de un niño feliz, se le caen las lágrimas al volver a sentir la sensación de conducir de nuevo una Harley.
Recuerdo perfectamente su frase en Brasil: no volveré a conducir una Harley nunca más, eso fue una época y ya no volverá, me quedo con el recuerdo, o algo por el estilo.
También me rio, me pongo a su lado, damos gas y progresivamente tomamos velocidad, es sorprendente lo bien que va la Electra de Carlo.
Cuando uno no tiene que estar pendiente de coger la dirección correcta y simplemente sigue a él que está delante suyo, tampoco está pendiente por donde pasa así que solamente puedo decir que hemos seguido en dirección Montblanc para luego desviarnos por carreteras secundarias y sin tráfico durante aproximadamente 1h más disfrutando del paisaje y de las curvas hasta llegar a nuestro destino de hoy, Santa Coloma de Queralt, donde aparcamos cerca de la plaza del centro.
Somos muchos, encontramos un bar con terraza, no hay mesas ni sillas para todos, pero al final las sacamos nosotros mismos y las posicionamos más hacia el centro de la plaza, ahora el sol pega fuerte, nos quedamos en camiseta. Llegan José Luís y Mari Pau. Esperamos un buen rato a que nos vengan a tomar nota, mientras tanto Chico se va a tomar una birra al bar de enfrente, hasta que Ton nos toma la nota él mismo y después de un buen rato más nos sirven finalmente el vermut. Todos estamos secos y con ganas.
Vamos ahora a comer en el restaurante reservado por Oriol, el Hostal Colomí, empezamos con un pica-pica variado más que correcto, pasamos al plato principal donde cada uno elige, yo pido una excelente carne poco hecha y bien servida. Vino, cerveza y agua.
Llega la hora del postre y traen una tarta con dos velas para celebrar el cumple de José Luís. Fotos, cafés y de nuevo en marcha, ha sido genial volver a juntarnos y cómo siempre muchas risas y buen rollo.
Una vez llegados a la A2 la recorrimos durante varios quilómetros hasta que el grupo tira para Barna mientras nosotros nos desviamos para Vilafranca. En Sitges paramos a repostar y nos chupamos las costas en caravana donde JL lo pasa fatal, pero al final acaba el día sin tener problemas con su hombro y la moto en el garaje.
Segunda salida del año, genial, mi mano responde perfectamente, tengo la sensación que este año Desy nos va a acompañar a varios lugares.
marzo 29, 2017 a las 6:46 AM
Felicidades por ambos reencuentros que te hacen feliz!